Zamba y rock a la luz de las velas
Sábado a la noche y Palermo nos guardaba un show muy especial de la mano de Los Tipitos en Sala Siranush. Días antes, la banda decidió cambiar el clásico formato de show por uno más café concert, con mesas distribuidas por el lugar y atención en las mesas para poder pedir algo de tomar y comer.
El arranque estuvo a cargo de “Flor negra”, Tan real (2007), seguida por “Apostar al amor” y “La ley de la ferocidad” de Push (2013). Los integrantes, salían al escenario con mucho color, por un lado, Raul Ruffino con un saco azul eléctrico, a la vez que Walter Piancioli llevaba un saco rojo y contrastaba Federico Bugallo con su clásico bajo color celeste pastel.
La Verborragia compositiva de Armando Camaleón (2004) -como Federico lo describía-, llegaba con “En el cielo”, uno de sus primeros trabajos. Otro de los momentos especiales, fue cuando llegó un el clásico cover de Los Fabulosos Cadillacs, “Siguiendo la luna”, de su disco con versiones de canciones de nuestro rock: Rock Nacional (2017).
El show tuvo un breve impasse, en donde la ambientación del escenario cambió. Se dispusieron varias sillas y hubo cambio de ropa y de instrumentos –de guitarras eléctricas a acústicas y de batería a bombo-. Así le daban comienzo a la presentación del nuevo material que tocan hoy por primera vez en vivo, que se llamará De mi Flor.
Con un disco de ritmos folklóricos apuestan a un cambio en su sonido para reinventarse e incursionar en otros horizontes musicales, para esto, invitaron al escenario a Lucho González en guitarra. Los primeros temas elegidos para la presentación fueron “Mujer, niña y amiga”, uno de los pocos temas que dieron a conocer como adelanto, que cuenta en el disco con la participación de Abel Pintos; seguida por “La sanatera”, lo que marca que se tomaron varias zambas y canciones folklóricas clásicas a las que les dieron su interpretación.
La sala con su toque arquitectónico antiguo con arañas, palcos y pisos de madera combinaba con estas mesas decoradas al estilo e iluminadas por velitas que le daban un toque más cálido a la noche. Mozos que van y vienen como parte de la escena, sin desentonar, se mezclaban entre los grandes ventanales y el público. El cálido ambiente era muy bien acompañado por esta nueva veta musical que nos mostraron hoy junto con la elección de canciones emotivas y sentidas; que se fusionaban con poemas de Atahualpa Yupanqui y chacareras tocadas en teclado.
La noche iba llegando a su fin y, volviendo a la distribución original, se despidieron con los clásicos que no pueden faltar: “Brujería”, “Algo” y “Campanas en la noche”, mientras los presentes se levantaban de sus sillas para aplaudir y cantar de pie.
La estructura del show nos llevó por momentos muy distintos, pero todos fueron bien recibidos por la gente; un público un tanto más familiar donde padres e hijos disfrutaban a la par. Pronto estará disponible el nuevo material novedoso para esta banda que siempre estuvo del lado del rock y hoy lo matiza con tintes de esa música bien nuestra como es el folklore y que, a juzgar por los aplausos de la sala, ya tienen la aprobación de su gente.
Lo que se escucha por ahí: - “Lunes celeste” - “Tenemos un puñado de canciones para ustedes” - “Cuando nos jugábamos el todo por el todo” - ”Toca la de los naranjos” - “Por una porción de papas fritas” - “El folklore da una sed” - “Tenemos que ir a alimentar a nuestra mascota virtual”
Fotos por Flor Berdichevsky.