La Chancha Muda volvió a ser fiesta en Palermo
El sábado 12 de agosto fue la segunda noche del doblete que La Chancha Muda ofreció en el Salón Pueyrredón, con un set list que recorrió su segundo disco llamado Sinfonías Libertarias, a diferencia del viernes en el cual transitaron Ya No Queda Más Lugar bajo La Alfombra.
Pocos días antes del fin de semana, las redes anunciaron que las entradas para ambas fechas se habían agotado, y fue por esta razón que las presentaciones fueron esperadas con gran expectativa.
Previo al show principal los muchachos de El Delirio De La Parca abrieron la noche, y posteriormente, a las 22 horas La Chancha Muda arrancó su lista con “Asfixia”, para continuar luego con “Un fuego sepultado en el jardín” y “Conejos”.
Con un sonido al palo la banda conformada por Gonzalo Pascual (Voz y Guitarra), Federico Fassa (guitarra), Rómulo Tomaselli (Trompeta), Cristian Tamanaha (Saxo), Diego Charadía (Bateria) y Maximiliano Vera (bajo), se mostró muy contenta arriba del escenario y muy agradecida por la presencia de todos los que asistieron. “La penitencia de la mosca” y “Tus aires” llegaron después.
El objetivo de ambas presentaciones estaba claro; hacer un recorrido completo por cada uno de sus discos y tocar de yapa alguna de las canciones que no se habían incluído en su edición final. En esta segunda noche, el primero de ellos llamado “Alteraciones”, hizo que la energía del público se recargara durante unos minutos mientras quietos y en silencio oían cada estrofa. Sin embargo apenas tocaron “Un gran engaño” la exaltación se apoderó nuevamente del salón y las rondas volvieron a aparecer. Luego llegaron “Captuspre” y “Policarbonatos de Plutonio”.
La función estaba por la mitad. La noche parecía avanzar rápido y el segundo tema inédito llamado “Versito” volvió a calmar a la audiencia. Pero todavía faltaba el cover de Patricio Rey y Sus Redonditos de Ricota a los que los pibes nos tienen acostumbrados, y esta vez el tema elegido fue “La pequeña novia del carioca”, que recibió un sinfín de aplausos.
Lo que se vivió a continuación fue una seguidilla de canciones al palo con las que el público enloqueció; “La escena”, ”Viajecito”, y “Bicho raro”, demostraron que el lugar había quedado chico para los grandes pogos que “El chiquero” formaba. A pesar de que los temas sonaran con fuerza, muchos de los presentes se hundieron en un profundo llanto, poniendo en evidencia que la música de esta banda les llega de una manera muy particular a sus seguidores. Las letras tienen un fuerte contenido social, y son el símbolo del mensaje que La Chancha Muda quiere transmitir; ”Mar de Fueguitos” (incluído en su disco anterior) es un claro ejemplo de esto. En ella el fervor en las voces de los fanáticos y la manera en la que los muchachos de Parque Chacabuco la interpretan, elevan a su pico máximo el frenesí de todos. Finalmente luego de que el cantante hiciera los agradecimientos correspondientes, “Con los ojos al revés” le dio el cierre a esta noche explosiva.
Fueron 90 minutos cargados de sensaciones; hombres y mujeres de distintas edades agitaron enardecidos de principio a fin. Este grupo tiene mucho para decir y sabe cómo hacerlo. Su talento no se discute y la respuesta de su público es increíble. Ahora sí, cuando el reloj marco las 23.30 el telón se cerró y el lugar que aún se encontraba inmerso en un clima de gran entusiasmo, empezó a vaciarse.
El doblete había terminado, la veda electoral comenzaría en pocos minutos y lo que se reflejaba en varias personas era la manija por la noticia que un rato atrás La Chancha Muda había dado: el 26 de agosto estarán presentándose gratis junto a Chau Pekín, en el Espacio Cultural Marcó del Pont (Flores), en el marco del cierre de la muestra Sinfonías Libertarias de Anibal Caubet -autor del arte gráfico del ultimo trabajo discográfico de la banda porteña-.
